17.10.11

Renaciendo


 Sentados bajo la sombra de los arboles del bosque mi corazón latió fuerte cuando tomaste mi mano por primera vez, la confianza se apodero de nosotros y tus brazos me rodearon, fue como si no necesitara nada mas, me sentí protegido al fin, en ese lugar, entre tus brazos, ya nada podria dañarme. De pronto me canse y me recoste sobre tu pecho, los rayos del sol del mediodía pasaban entre las ramas de los pinos y las aves inquietas nos observaban celosas. Alze la vista hacia tu rostro, tu me miraste por unos segundos. Yo acerque mis labios y un beso nos dijo a ambos que eramos el uno para el otro. reímos, conversamos y nos conocimos, pero yo sentí en todo momento como si siempre te hubiese conocido.