1.6.12

Treinta de mayo

Sentí como si aquel lugar fuera el mio, entre sus brazos, quería hundirme en su piel, perderme en su mente y permanecer congelado en sus recuerdos para que así nunca pudiera olvidarme, olvidar que yo, hubiese hecho cualquier cosa para verlo feliz. Y es todo lo que necesito, saber que esta ahi, del otro lado, muy cerca mio, aunque en verdad la distancia me quiebre en pedazos. Recorde con su abrazo aquellos besos del pasado, y derrame en secreto una lagrima sobre sus hombros, "adios" me dijo su perfecta voz, "adios" le dije con mi corazon gritando de dolor, llorando todo el amor que no puedo darle.

5 comentarios:

Sandra Herrero dijo...

Me encanto la entrada, lo que no entiendo es porque no puedes darle amor, si le dijiste adios con tu corazon gritando de dolor. Que la distancia no te gane. Besos y me encanto, la foto y la entrada :)

Y. dijo...

Salí hace poco de una situación muy similar. Me sentí comprendida cuando leí tu entrada... lo que es quedarse con todos los sentimientos sentidos en las manos... y todo lo que no pudo ser dado en el alma. Destroza. Pero a veces es mejor decir adiós.
Un saludo.

Carolina Campos V. dijo...

Es muy particular esa sensación de sentirse como en casa, el lugar al que pertenecemos en los brazos de alguien. Cuando ese alguien se va, es como si nos desplazaran, nos echaran de ese hogar, sentimos que es casi imposible olvidar aquellos brazos, pero luego descubrimos que el único lugar al que siempre perteneceremos es al hogar dentro de nuestra alma, no en el de los demás.

Hermoso como siempre Nico, un abrazo!

Eli dijo...

hermoso!
q la distancia no gane como muchas veces,vale la pena vivir el amor..besos!

Nancy dijo...

Es hermoso, lo describes a la perfección.
Un amor que se fue, y un amor al que no le pudiste decir lo mucho que la querías.
Muy lindo, un beso!